MANIFIESTO DE LA ORGANIZACIÓN DE MUJERES DE SOMOS-ISTA:”NO ES UN CASO AISLADO, ES EL PATRIARCADO”
Un año más, en este 25 de noviembre, desde la Organización de Mujeres de SOMOS-ISTA alzamos nuestras voces para denunciar la violencia machista en todas sus formas y reivindicar la necesidad urgente de una transformación social y política que ponga fin a esta lacra.
No es un caso aislado, es el patriarcado
Los datos hablan por sí mismos. Según el Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén), más de 95.000 casos activos estaban bajo supervisión policial a finales de julio de este año 2024, un incremento del 18,8% respecto al mismo periodo de 2023. Las mujeres con protección oficial han aumentado en un 19,4%, alcanzando las 57.923 mujeres. Detrás de cada cifra hay una mujer, una historia de sufrimiento, resistencia y valentía.
La violencia machista tiene muchas caras, no es solo física. Es psicológica, económica, sexual, social y vicaria. Todas estas formas de violencia afectan a las mujeres en diferentes etapas de su vida, especialmente a las mujeres en situación de vulnerabilidad.
El 98% de las mujeres de España han sufrido acoso callejero, y una de cada cuatro lo vive a diario, según un estudio reciente de la Universidad de Córdoba.
Las mujeres mayores de 65 años y las mujeres en zonas rurales enfrentan barreras añadidas para denunciar las violencias que sufren, muchas veces por los estigmas sociales y culturales que perpetúan la resignación.
Las mujeres con diversidad funcional tienen un riesgo cuatro veces mayor de sufrir violencia sexual.
Este año, la violencia vicaria ha alcanzado un récord desgarrador: 10 menores asesinados en 2024. Las mujeres que son madres siguen siendo un colectivo especialmente atacado; más de la mitad de las víctimas con protección tienen hijas e hijos menores a su cargo.
Responsabilidad política y social
Las leyes y pactos no pueden quedar en papel mojado. El Pacto de Estado contra la Violencia de Género no se está cumpliendo en muchos aspectos. La falta de recursos, la precariedad de los servicios de atención a las víctimas y la insuficiencia de medidas preventivas perpetúan un sistema que no protege adecuadamente a las mujeres.
A pesar de que la Ley del “Solo sí es sí” estipula la creación de 52 centros de crisis sexual en el Estado español, a día de hoy solo están operativos 10 centros. Este incumplimiento refleja la falta de prioridad que otorgan las instituciones a la lucha contra la violencia machista. La inacción política también mata.
No basta con recordar, debemos actuar
En lo que va de 2024, 76 mujeres han sido asesinadas en España a manos de sus parejas o exparejas. Desde aquí, recordamos sus nombres, sus vidas truncadas, y denunciamos un sistema que sigue siendo cómplice de su sufrimiento.
La educación es la clave para transformar la sociedad. Desde la Organización de Mujeres insistimos en la necesidad de incorporar una perspectiva de género en las aulas y de promover programas educativos que fomenten el respeto, la igualdad y la resolución pacífica de conflictos. La juventud es la esperanza de un futuro libre de violencia.
Exigimos:
- El cumplimiento efectivo del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, con dotaciones presupuestarias suficientes.
- La creación inmediata de los centros de crisis sexual comprometidos, con personal especializado para atender a las víctimas.
- El refuerzo de los recursos que garanticen la protección adecuada de las mujeres
- La puesta en marcha de campañas de sensibilización dirigidas a la sociedad, con especial atención a los entornos rurales y colectivos vulnerables.
- La formación obligatoria en perspectiva de género para todas las personas implicadas en la atención a víctimas, especialmente en los ámbitos social, educativo y sanitario.
Por ellas, por nosotras.
Desde la Organización de Mujeres de SOMOS-ISTA, seguimos luchando. Por las mujeres que ya no están, por las que resisten, por las que aún no pueden alzar la voz. Porque no es un caso aislado, es el patriarcado, y el cambio sólo será posible con el compromiso de todas y todos.
Aragón, 25 de noviembre de 2024.